Por Crisstian M Villacaña 
Por José Ángel Inzunza
Al margen de las dudas sobre si los servicios de salud pública y asistencia social están, o no, «mejor que en Dinamarca»… trascendió que se está investigando a personal del IMSS de Baja California, por un sistemático esquema de fraudes, en donde, aprovechándose de información, funcionarios han utilizado registros patronales para inscribir a supuestos empleados, a fin de evadir impuestos, o hacer cobros indebidos, hasta «cuotas de piso».
La investigación arroja que algunos de los funcionarios son de áreas administrativas, pero se sospecha también de altos funcionarios que pudieran estar coludidos.
Para favorecer a amigos o familiares, usan registros patronales sin movimientos, ya que, hay quienes realizan el trámite, pero, pasan meses sin que den de alta a nadie, y, ahí es donde entran los funcionarios para dar de alta a amigos y familiares, sin tener que pagar, ya que todo se carga al «patrón».
Esas maniobras indebidas e ilegales (pues se hacen sin conocimiento de la persona del registro patronal usado) siguen hasta que el Sistema obligue enviar al «patrón» los requerimientos correspondientes, por la falta de pago de las cuotas obrero patronales, y, por supuesto, con sus multas y recargos altísimos.
Hasta el Infonavit le envía requerimientos con sus consabidas multas y recargos, porque en las cuotas obrero patronales van incluidas las correspondientes a ese instituto.
Para colmo de males, otras maniobras ilegales son las de asegurar al patrón timado que pueden ayudarle a reducir el adeudo a cambio de «moches», con la amenaza de que hasta la cárcel puede ir, y eso ellos pueden arreglarlo, o que tienen conocidos que les pueden «ayudar».
Encima de que el patrón «hackeado», por el propio personal del IMSS, nunca había asegurado a nadie, ni conoce a los «asegurados», y, por lo tanto, no tenía que pagar nada, ahora está con órdenes de embargo, clausura, y, extorsionado por los «bondadosos» funcionarios que se ofrecen a «ayudarle».