*Lo llevó a cabo la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios en coordinación con el Consulado General de la República Popular de China en México.
ENSENADA, B.C.- Ante 45 asistentes de los distintos Restaurantes de Comida China de Ensenada, la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios de Baja California (COEPRIS BC), impartió el curso de buenas prácticas de higiene para el proceso de alimentos, bebidas o suplementos alimenticios, el cual fue impartido de forma simultánea en los idiomas español y cantonés.
Durante la inauguración el Comisionado Estatal de la COEPRIS BC, Rigoberto Isarraraz Hernández, agradeció la presencia de la Cónsul General de la República Popular de China en México, Yu Yue, por el apoyo para la convocatoria, así como para facilitar la traducción al idioma chino cantonés, evitando que el lenguaje sea una barrera que limite el aprendizaje de esta comunidad en nuestra región.
El funcionario señaló que se está trabajando en diversos ámbitos para incentivar a la población para que se acerque a la COEPRIS BC, conozca los servicios que se ofrecen, los tramites que se realizan y evitar con ello cualquier acto de extorsión, empoderándolos para que denuncien cualquier irregularidad.
Durante el curso se abordó la importancia de la inocuidad alimentaria y disminuir las enfermedades trasmitidas por alimentos contaminados, lo cual se está trabajando de forma intensiva con todos los restaurantes de la región; buscando llegar al programa de auto regulación.
En este curso se imparte lo que dicta la Norma Oficial Mexicana 251, con lo cual se busca prevenir los riesgos en la contaminación en la preparación de los alimentos, el cual puede tomar cualquier empleado que labore en algún restaurante.
Durante la capacitación, se hizo énfasis en las principales fuentes de contaminación que podrían afectar la calidad de los alimentos, los cuales pueden ser químicos, productos de limpieza, ya sean detergentes, cloro, desengrasantes, la temperatura ambiente entre otros o bien físicos como puede ser cualquier objeto como plumas, aretes, o utensilios de cocina que se rompan y queden en los alimentos.